A medida que aprendemos más y más sobre nuestro microbioma, la idea de un trasplante fecal (popularmente llamado trasplante de caca o trasplante de heces) de repente no suena tan descabellada. Al fin y al cabo, la caca está llena de bacterias de nuestra flora intestinal, y los científicos han reconocido por fin que las bacterias son esenciales para el funcionamiento del organismo. En los hospitales holandeses, el trasplante de heces sólo se hace entre 5 y 10 veces al año. Y también sólo cuando fallan todos los antibióticos. En Estados Unidos, el trasplante de heces se realiza en los hospitales entre 5 y 10 veces por semana. Mientras tanto, cada vez surgen más clínicas en el extranjero. Cada una con su propio método. Aunque también puede ser mucho más fácil. Puedes, gracias a nuestra nueva técnica, hacer tú mismo un trasplante de heces en casa.
La importancia de una flora intestinal rica.
Tienes 14 billones de bacterias dentro y alrededor de tu cuerpo. Hasta ahora se han descubierto 2.000 especies. Todas con su propia tarea. Todo el mundo debería tener 600 especies de esas 2.000, 30 de las cuales son esenciales. Cuantas más haya de cada especie, mejor, por ejemplo, se absorbe tu comida, mejor se realizan las tareas. Si todo está bien representado, tu cuerpo funciona de forma óptima. Si faltan especies, o una especie es demasiado escasa en número, entonces otras bacterias pueden asumir parte del trabajo. Como resultado, su trabajo no puede realizarse con la misma eficacia. Surgen problemas en tu organismo que pueden ir de mal en peor. Las investigaciones demuestran que, con el paso de los años, el estilo de vida occidental ya nos ha dado una flora intestinal menos rica. Observa aquí la diferencia entre el microbioma antes y 2 meses después de unadosis de 24 cápsulas.