Tu cuerpo alberga hasta cien billones de bacterias que son la base de tu salud.
La importancia de las bacterias en nuestro intestino
Las bacterias buenas son importantes para mantenerse sano. Tu flora intestinal es el motor de tu sistema inmunitario y no quieres que ese motor falle. Las Bifiobacterias y los Lactobacilos son ejemplos de bacterias buenas. Las bacterias malas nos permiten enfermar. Como las bacterias buenas son abundantes y pueblan bien el intestino, no hay espacio para que crezcan las bacterias intestinales malas. ¡Eso sólo ocurre con una flora intestinal sana! En nuestra sociedad actual y con nuestro estilo de vida moderno, cada vez tenemos menos bacterias buenas. Por eso sigue siendo muy importante la alimentación variada y sin procesar y beber mucha agua. Debido a nuestras técnicas de producción de alimentos, que también son muy limpias, en este proceso también se pierden las bacterias buenas esenciales, los hongos y las levaduras que se encuentran en la naturaleza. Es más probable que la falta de bacterias buenas cause problemas intestinales que un exceso de bacterias malas. En definitiva, las bacterias nos ayudan a digerir los alimentos, nos protegen contra las infecciones, nos proporcionan vitaminas y ácidos grasos y mantienen sana la flora intestinal. En condiciones favorables, ¡una bacteria puede fabricar hasta 16 millones de copias de sí misma en ocho horas!